Azimut Fly 62: Revolución en el mundo de los Flybridge

El Fly 62, no sólo es el nuevo modelo de una de las Series más representativas de Azimut, sino un hito en la evolución del segmento.

Este barco busca armonizar la imaginación creativa con los deseos de los propietarios de acercarse cada vez más al mar en un flybridge diseñado para largas estancias a bordo. En este segmento, tradicionalmente caracterizado por una zona de acceso al agua más separada, la respuesta de Azimut, radical en su aparente sencillez, es reinventar la bañera y girarla hacia popa, creando un descenso progresivo hacia el mar. Así nace el Beach Cockpit. El espejo de popa se abre hacia el exterior y, con un movimiento sincronizado, el sofá desciende, eliminando todas las barreras físicas y creando una amplia zona para tomar el sol cerca del agua con una conexión con el mar única para un yate de este segmento.

El diseño exterior es obra de Alberto Mancini, que redefine los cánones de la categoría inspirándose en las tendencias más recientes del mundo del automóvil y en la revolución funcional y estética de los SUV. Los volúmenes de la superestructura del Fly 62 avanzan hacia la proa, lo que permite desarrollar la bañera manteniendo y evolucionando la figura estilística deportiva de la Serie Fly de Azimut, reconocida por líneas que se persiguen y superficies cada vez más limpias. El nuevo techo rígido diseñado por Alberto Mancini destaca por sus líneas hipermodernas, que casan con la linealidad del desarrollo horizontal de las ventanas del casco.

Para los interiores, Azimut renueva su colaboración con el arquitecto Fabio Fantolino en el que es su segundo proyecto con el astillero. Fantolino ha creado espacios «abiertos», libres de obstáculos visuales, para lograr una sensación de proximidad al mar sin restricciones, y ha interpretado los ambientes interiores con un diseño limpio y fresco, compuesto por unos pocos detalles esenciales.

Azimut Yachts